FERIA DEL LIBRO DE VALENCIA DE DON JUAN (LEÓN) | 17 de Julio 2016

En la cuarta edición de la feria del libro de Coyanza estuve contando, firmando, charlando y jugando con los cuentos.
Fue un fin de semana rodeado de libros y libreros. De niñas, madres, niños y padres que querían disfrutar del mundo del cuento. ¡Y lo conseguimos!
Hacía mucho calor, ¡sobre todo con una casaca pirata de pura lana! ¡Pero y lo que nos reímos!
El público estuvo fenomenal, ¡fueron todos la tripulación de Cacurcias y los personajes que ayudan al ratoncito Pérez!
Un placer.

Feria del Libro de Madrid. Kirikú y la bruja | 12 de Junio 2016

Feria del Libro de Madrid. Dragón Lector | 11 de Junio 2016

Alejandra y Clara, las Dragonas, decidieron que si uno y uno son dos, una caseta y otra caseta… ES EL DOBLE. Y sí lo hicieron. Doble de libros, con vainilla y chocolate: un helado que daba gusto.
Nos lo pasamos en grande (¡y nunca mejor dicho!).
Entre firma y firma: risas.
Entre cuento y cuento: más risas.
Además, ese día se llenó de amigos.

Feria del Libro de Madrid. Liberespacio | 5 de Junio 2016

Me gusta hacerme fotos con Zaida, de Liberespacio (la persona que conozca su sonrisa ya sabrá por qué), pero este año… ¡no tuvimos tiempo!
Vamos, que la cosa consistió en firmar, firmar y luego… firmar.
Vinieron a visitarme amigas, familias, grandes payasos y un montón de nuevos lectores.
Me hizo mucha ilusión dedicar un libro a un futuro recién nacido (a los pocos días vio la luz y le contaron su primer cuento).

Es un placer sentirse rodeado de Zaida y su equipo.

Actuación en el pabellón infantil de la feria del Libro de Madrid | 3 de Junio de 2016

Me invitaron las editoriales Nube Ocho y La Fragatina a contar cuentos en el Pabellón Infantil de la Feria del Libro de Madrid (El Retiro). Vamos, todo un clásico en mi carrera.

Muchas personas dicen que, si cuando actúas —o cuentas—te lo pasas bien, se lo transmites al público y también disfruta. ¿Cómo explicar que yo SIEMPRE me lo paso mejor que el público? Ese es el secreto.
Vivimos silencios (sí, en ese “pedazo” pabellón conseguimos que no se escuchase nada), risas, carcajadas, momentos mágicos… En pocsas palabra: vivimos los cuentos.